La cirugía de catarata, es una de las cirugías que más se realizan a nivel mundial. Es una cirugía rápida, ambulatoria y que permite que rápidamente después de ella las y los pacientes puedan ver muy bien.
En esta cirugía, lo que se remueve es el Cristalino, que es el lente natural del ojo, que con el tiempo, se pone opaco. Al ponerse opaco, pasa cada vez menos luz, y esto hace que cada vez baje más la visión.
Con la cirugía de catarata, resolvemos el problema de la opacidad, y siempre se debe poner un lente intraocular, porque el cristalino, que fue el contenido que se destruyó en la cirugía, era el lente natural del ojo. El lente intraocular que se pone, nos permite colocar la graduación del paciente dentro del ojo, y dependiendo el tipo de lente que se coloque, el paciente puede, después de la cirugía ver de lejos, intermedio y de cerca sin la necesidad de anteojos.
Es una cirugía que no duele. Todas nuestras cirugías de catarata, sin excepción, se realizan bajo la supervisión de un anestesiólogo, el cual, coloca medicamento por la vena del paciente, para darle una sedación, y gracias a esto, se está tranquilo y relajado durante el procedimiento, el cual, no es doloroso ni molesto.
La recuperación es rápida y los cuidados post operatorios muy puntuales.
En los últimos años, la cirugía de Glaucoma ha evolucionado de gran forma, y ahora contamos con procedimientos más efectivos y que pueden combatir de forma más temprana esta enfermedad.
Algunos de ellos pueden hacerse solos, o también se pueden hacer combinados con cirugía de catarata.
Este tipo de cirugías no son dolorosas, son ambulatorias, y tienen pocas restricciones durante los días posteriores al procedimiento.
De igual forma, existen otros tratamientos con láser que también realizamos en GVS Oftalmología para Glaucoma, tales como: SLT, MLT, Iridotomías, entre otros.
Siempre, lo más importante en una enfermedad como el glaucoma, es en lo posible hacer un diagnóstico temprano, para poder tener un mejor control de esta enfermedad.
En la cirugía de pterigión, el objetivo es quitar el tejido que ha salido y que invade la cornea, pero a la vez, también colocar un injerto, para tener una mejor cicatrización y que las posibilidades que existan en que vuelva a salir el pterigión disminuyan aún más.
Es una cirugía ambulatoria, no es dolorosa, y en la mayoría de los casos se realiza bajo anestesia local (gotas), aunque hay casos donde se realiza con anestesia Sedación, con un anestesiólogo en el quirófano.
El procedimiento es rápido, los pacientes pueden sentir una pequeña sensación de basura en el ojo los primeros días después de la cirugía, pues en todas nuestras cirugías usamos injerto, y ese injerto, se debe suturar a la conjuntiva, las suturas se retiran alrededor de los 10 a 15 días, pero mientras estén en el ojo, pueden dar una pequeña molestia.
La recuperación es rápida, y los cuidados post operatorios son pocos y fáciles de cumplir.
Existen muchos tipos de cirugía refractiva.
Actualmente, estamos utilizando la técnicas más modernas, 100% láser, el FemtoLASIK y el ReLEx SMILE (Small-Incision Lenticule Extraction) . En esta técnica, un láser especial realiza un tallado dentro de la cornea, y resulta en una lentícula. Esta lentícula se extrae de la cornea y de esa forma se corrige la graduación.
Existen otras técnicas que también realizamos, como el LASIK o el PRK, donde se corta la superficie de la cornea o se retira la capa superior, para luego poner el láser. Son técnicas que se han usado muchos años, y que se usan en casos específicos.
La presbicia, comienza a afectar a la mayoría después de los 40 años. Es esa molesta incapacidad de poder ver bien las cosas de cerca, y que necesitamos usar anteojos en la mayoría de los casos para lograrlo.
Existen técnicas novedosas que utilizamos para ayudar a los pacientes con estas molestias de la presbicia, y que sean capaces de recobrar su independencia de anteojos y que tengan una mejor calidad de vida.
Existen varias técnicas que se pueden usar para combatir la Presbicia, al conversar con usted en la consulta, le presentaremos la técnica más adecuada para su caso.
El tratamiento para el queratocono consta de varias fases. Encontrar la causa y tratarla, detener el avance y mejorar la visión, son algunas de estas fases.
Existen procedimientos muy útiles para detener la progresión de un queratocono, tales como el Crosslinking, donde se somete la cornea a un tratamiento con Rivoflavina y se expone a luz ultravioleta por un período de tiempo muy controlado. Esto, ocasiona un cambio en las fibras de la cornea que ayudará a que no empeore el cuadro.
En otras fases de la enfermedad, se pueden pensar en cirugías como el implante de anillos o segmentos intraestromales. Este procedimiento estabiliza la cornea y puede mejorar la visión del paciente.
Después de una cirugía de catarata, un número importante de pacientes, puede empezar a notar desde semanas, meses y hasta años después de la cirugía, que su visión comienza disminuir de nuevo.
En estos casos, una de las causas puede ser que la “bolsita“ en la que se pone el lente en la cirugía, se haya puesto opaca.
Para esto, usamos un procedimiento que se llama Capsulotomía, aunque a veces la gente lo conoce como una “limpieza del lente intraocular“. En este procedimiento, no se toca el lente, lo que se hace es con un láser especial, quitar lo opaco de la cápsula, haciendo un pequeño agujero en ella.
Es un procedimiento que no duele, es ambulatorio, y los pacientes únicamente tienen que ponerse unas gotas por varios días después del procedimiento, pero pueden hacer su vida normal.
Existen una gran cantidad de lesiones que se pueden dar en los párpados o en la conjuntiva. Siempre es muy importante que el oftalmólogo las revise para considerar de donde vienen y cuál es le mejor tratamiento.
En caso de que se tengan que retirar, siempre es importante enviar la lesión que vamos a quitar con el patólogo o patóloga, para que analice la lesión y sepamos exactamente qué es y si requiere tratamiento adicional.
Existen muchos tratamientos láser para la retina.
Sin embargo, uno de los más comunes es la fotocoagulación por un desgarro o un agujero en la retina. Estas lesiones, se pueden presentar en cualquier persona, pero generalmente las vemos en pacientes con mucha miopía, después de un golpe en el ojo o de una cirugía. Y puede dar muchos síntomas, los principales es que los pacientes ven como “luces“ en su campo visual o algunas veces “basuras o puntos“ en el campo visual, aunque pueden dar otros síntomas.
Si un desgarro o agujero no se trata a tiempo, puede progresar y provocar un desprendimiento de retina, y que el paciente tenga que entrar a cirugía de emergencia.
Otro casos donde podemos fotocoagular la retina, es en pacientes diabéticos, que tienen sangrados u otros problemas en la retina, y se pone láser para tratar que el problema no empeore.
Este procedimiento lo realizamos con nuestro láser Supra 577Y. Son procedimientos rápidos y ambulatorios.
En el caso que tengamos un chalazión en el párpado, que no resuelve con medicamentos, se debe hacer una pequeña cirugía.
En esta cirugía, se drena el contenido, y con mucho cuidado, se retira un tejido interno, para que no se vuelva a hacer.
Es un procedimiento que se debe hacer en quirófano, para mayor confort. Se realiza normalmente con anestesia local.
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